Tras una serie de amenazas y una orden ejecutiva firmada, esté miércoles, finalmente el gobierno de Estados Unidos designó a seis cárteles mexicanos como organizaciones terroristas. A la lista inicial se uniría el Cártel del Golfo, considerado el más antiguo en la historia de México.
El aviso 12672, que giró el Departamento de Estado del país vecino, establece que junto al Fiscal General y el Secretario del Tesoro, se llegó a la conclusión de que existe una base fáctica suficiente para concluir que los mencionados grupos representan un riesgo “para la seguridad nacional, la política exterior y los intereses económicos de Estados Unidos”.
La notificación designa como terroristas a los siguientes cárteles mexicanos:
- Cártel de Sinaloa (Federación Mexicana, Cártel de Guadalajara);
- Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG);
- Cárteles Unidos (Cártel de Tepalcatepec, Cártel del Abuelo, Cártel de Los Reyes);
- Cártel del Noreste (también conocido como CDN, Los Zetas);
- Cártel del Golfo (CDG, Organización Osiel Cárdenas-Guillén) y,
- La nueva Familia Michoacana (LNFM).
La designación entrará en vigor mañana tras ser publicada en el Registro Federal de Estados Unidos.
Los cárteles internaciones que también entran en esta clasificación son: el Tren de Aragua y los Mara Salvatrucha (también conocida como MS-13).
“Por lo tanto, por la presente designo a las organizaciones antes mencionadas y sus respectivos alias como Organizaciones Terroristas Forzadas de conformidad con la sección 219 de la INA. Esta determinación se publicará en el Registro Federal”, se lee en el memo número 12672.
Donald Trump firma decreto para designar cárteles como organizaciones terroristas
En enero, Donald Trump firmó un decreto en el que prometía designar a los cárteles del crimen organizado como organizaciones terroristas. En ese momento declaró que para lograrlo invocaría la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798.
La amenaza escaló hasta hace una semana, cuando en un reporte el NYT aseguró que Trump pronto accionaría su plan. En la investigación, funcionarios estadounidenses confirmaron que el decreto que Trump firmó el pasado 20 de enero, en la que pedía no solo medidas enérgicas contra los principales cárteles de la delincuencia organizada, sino su “eliminación total”, se implementaría pronto.
Cabe recordar que la orden ejecutiva exigía las designaciones, bajo el argumento de que los cárteles “constituyen una amenaza para la seguridad nacional más allá de la que representa el crimen organizado tradicional”.