El Papa Francisco fue sepultado esta madrugada en la Basílica de Santa María Mayor en el centro de Roma.
Previamente, se estima que más de un cuarto de millón de personas de todos los ámbitos se reunieron en la Plaza de San Pedro el sábado para despedirse definitivamente del Papa Francisco en su Misa de Réquiem.
La solemne liturgia fue presidida por el Cardenal Giovanni Battista Re, Decano del Colegio Cardenalicio, acompañado por unos 250 cardenales, patriarcas, arzobispos, obispos, sacerdotes, religiosos consagrados y laicos.
Al término de la homilía, los restos mortales del Papa Francisco fueron transportados a bordo del papamóvil por las calles de Roma hasta su lugar de descanso eterno en la Basílica de Santa María la Mayor.
Papa Francisco: el primer papa sepultado fuera del Vaticano
El Papa es el primero en más de un siglo en ser enterrado fuera del Vaticano, y su sepultura fue un evento privado, permitiendo que los más cercanos a él rindieran sus respetos.
El rito de entierro del Papa estuvo precedido por el canto de cuatro salmos y acompañado por cinco intercesiones, seguido del canto del Padre Nuestro.
Los cardenales que podrían ser candidatos a reemplazar al Papa Francisco
Tras la oración final, se imprimieron en el ataúd los sellos del Cardenal Camarlengo de la Santa Iglesia Romana, Kevin Joseph Farrell, de la Prefectura de la Casa Pontificia, de la Oficina de Celebraciones Litúrgicas del Romano Pontífice y del Capítulo Liberiano.
Posteriormente, el ataúd fue colocado en la tumba y rociado con agua bendita mientras se cantaba el Regina Caeli.
Kevin Farrell: exaUDEM responsable de la sucesión del papa Francisco
Luego se realizó la formalidad final: el notario del Capítulo Liberiano leyó el acta que certifica el entierro ante los presentes.
Esta fue firmada por el Cardenal Camarlengo, el Regente de la Casa Pontificia, Monseñor Leonardo Sapienza, y el Maestro de Celebraciones Litúrgicas Pontificias, Arzobispo Diego Ravelli.