La artista escénica, Xitlalli Treviño denunció que durante la ejecución de una obra que ofreció en la edición 2023 del Festival Arte/Acción (FAA) fue agredida sexualmente por la veterana performancer, Rocío Boliver, conocida como “Congelada de Uva”.
De acuerdo con la narración de Treviño, los hechos ocurrieron el 22 de noviembre de 2023, en la Fábrica de Artes y Oficios (Faro) Cosmos en la Ciudad de México. Allí, su participación fue programada para el evento de apertura, donde presentó la pieza titulada «UN CLON DE MÍ». Treviño, refiere que, en la tercera acción de su pieza, una mujer del público comenzó a intervenir de forma “insistente y violenta”.
«Durante la ejecución de la obra, en el momento correspondiente a la tercera acción, una mujer del público —a quien no tenía identificada, ya que el espacio estaba oscuro y no tenía conocimiento previo de su presencia— comenzó a intervenir de manera insistente y violenta”, explica la artista.
Xitlalli señala que intentó frenar la agresión apoyándose en los diálogos de su personaje, pero que, en respuesta, Boliver dijo: “Ah, no. Te me ofreciste ahora te aguantas”. Tras esto, procedió a derribarla y a montarse en su espalda para inmovilizarla.
“Interrumpió reiteradamente y llevó a cabo actos que constituyen una agresión verbal, sexual y física (…). Rompió mi vestuario. Introdujo su dedo en mi ano mientras hacía comentarios denigrantes y sexuales sin mi consentimiento verbal y explícito. Me embarro mi propio excremento en la boca. Me humilló públicamente con frases como ‘Putita, dame tu culo para que te abras las nalgas’, ‘Yo soy más puta que tú’, ‘¿Qué chingaderas de performance es esto que haces?’, ‘Me lo ofreciste, ahora te aguantas’ (…). Solicitó a los asistentes ‘alguien que done su falo’ e intentó continuar con la agresión con objetos como pedirle al público unas tijeras para cortarme el pelo”, Xitlalli Treviño.
La artista escénica reiteró que esta intervención no formaba parte del performance y que Rocío Boliver en ningún momento contó con su consentimiento. De acuerdo con esto, Congelada de Uva cometió abuso sexual.
Parte de la ejecución de la pieza requirió que Treviño se encontrara inmovilizada, por lo que no tenía capacidad para defenderse; esta situación también derivó en que el público tardara en reaccionar al creer que era parte del guion del performance.
“Logré alertar a una persona diciéndole que unas de las llaves para liberarme estaba en mi vestuario. Una mujer del público intervino finalmente, deteniendo la agresión y ayudándome a liberarme. Al concluir, intenté continuar con la obra en estado de shock emocional severo, pero tuve que retirarme entre lágrimas. La agresora fue interceptada por el organizador, quien le preguntó por qué actuó así, a lo que ella respondió que “yo me ofrecí”, y abandonó el lugar inmediatamente”, expresó.
Cabe destacar que la denuncia pública está sustentada con fotografías y videos donde se observa a Boliver sometiéndola en el piso mientras la insulta. Además de esto, hay testigos que respaldan a Treviño al haber presenciado el ataque.
La atacante emitió un comunicado, -el cual desapareció tras eliminar sus redes sociales- en el que niega la acusación e indica que “reaccionó como interprete” y que Xitlalli “la provocó”.
No obstante, en el mismo, admite que tuvo contacto físico con la interpreta y que no tuvo su consentimiento explícito para ninguna de las acciones violentas.
“He sido artista intérprete profesional y profesor de performance durante más de 30 años, reconocido en prácticamente todos los continentes del mundo (…). Todo mi trabajo tiene un tema feminista y postfeminista. (…) Ella se acercó a mi varias veces y –puede que me equivoque– me reconoció como una artista muy conocida, el hecho es que ella insistió bastante en que reaccione a su acto provocativo (…). Así que en algún momento y después de varias veces me encuentro reaccionando como intérprete, separándome de la audiencia entro en el marco de Liminal Space, donde todo puede suceder durante una actuación”, Rocío Boliver, la Congelada de Uva.
Treviño ha exhortado a quienes fueron testigos de la agresión a compartirle su testimonio, puesto que le ayudarían en su denuncia.
Por su parte, el FAA ofreció una disculpa por no haber actuado en el momento y justificó el no haber denunciado el ataque públicamente.
«Reconocemos que el silencio de la organización no ayudó al caso de Treviño y avivó malos entendidos entre ambas partes. Sin embargo, quisimos tratar de respetar sus tiempos y los de su equipo legal, como en ese instante entendimos se nos solicitó. Nunca cerramos el diálogo con ella. Hasta la fecha nos encontramos en comunicación», justificó el festival.