Ante el lamentable fallecimiento del Papa Francisco el día de hoy lunes 21 de abril del 2025, el Vaticano estaría llevando a cabo en los próximos días la elección de un nuevo sumo pontífice para dirigir la iglesia católica: el Cónclave, por lo que aquí te contamos qué es, su proceso y todos los pasos a seguir.
¿Qué es el Cónclave?
La elección de un nuevo Papa se hace gracias al Cónclave. Participan todos los cardenales que cumplan con una serie de requisitos y se realizan diferentes rondas de votación hasta dar con el nuevo Papa.
Las reglas del Conclave se han mantenido relativamente con pocos cambios desde hace más de 800 años y es regulada actualmente por la constitución apostólica Universi Dominici Gregis.
Proceso del Cónclave
El Cónclave es convocado por el Colegio Cardenalicio y se debe de realizar máximo 15 días después que el puesto de Papa quede vacante. Solamente pueden votar los cardenales que tengan menos de 80 años, por lo que de los 252 cardenales de la iglesia católica solamente 139 podrán votar en el próximo Cónclave.
Los cardenales se reúnen desde 1878 en la Capilla Sixtina para realizar la votación. Este lugar contará con una amplia seguridad para evitar filtraciones o influencias en las votaciones, por lo que se prohíbe el uso de aparatos electrónicos y el acceso a radios, televisión o periódicos.
Después de una misa especial y de un juramento en el que se comprometen a mantener en secreto todo lo visto en la asamblea, los cardenales se reúnen en la Capilla Sixtina hasta que se decida al nuevo Papa. Como el proceso puede durar días, los cardenales se alojan en la Casa Santa Marta para dormir y comer.
Pasos para el proceso de la elección
Se designan nueve cardenales al azar para oficiar el proceso, de los cuales tres servirán de fiscales, tres serán los encargados de recoger los votos y los últimos tres se encargan de revisarlos. De ahí empieza una fuerte serie de discursos y sermones entre los cardenales, quienes expresan su opinión política y religiosa con el fin de dirigir a la iglesia católica bajo los ideales del cardenal de su preferencia.
Se hace en total cuatro votaciones al día, dividas en dos rondas con dos sesiones cada una. Los cardenales escriben el nombre del candidato de su elección en una papeleta que será depositada en el Alta Mayor. El Papa se decide cuando solamente un candidato obtiene dos tercios del total de los votos.
Si ningún candidato llega a los dos tercios necesarios se realiza otra ronda de votaciones. Las papeletas son quemadas antes de iniciar la segunda ronda, esto genera la famosa fumata de humo negro que avisan a los fieles que el proceso de elección continúa.
El proceso puede ser muy tardado, así que para evitar esto se designó que, a partir de la 34ª ronda de votación, solamente se podrá votar por los dos cardenales que obtuvieron más votos e la última ronda. Cuando se llega al resultado, se queman las papeletas y con ayuda de químicos, la fumata liberará un humo blanco, el cual avisa a los fieles congregados en la Plaza de San Pedro que un nuevo sumo pontífice ha sido electo.
¿Cómo se presenta al nuevo papa?
El cardenal elegido deberá aceptar el cargo ante el cardenal decano y elige el nombre por el cual será llamado. El nuevo Papa será dirigido a la Sala de las Lágrimas en donde es vestido con una túnica y zapatos rojos para ser presentado inmediatamente ante los fieles.
El cardenal decano hará su aparición en el balcón frente a la Plaza de San Pedro para pronunciar el famoso “Habemus Papam» (Tenemos Papa) y revelar el nombre del nuevo sumo pontífice. El Papá saldrá al balcón para saludar a la congregación.