Este lunes Irán lanzó misiles contra bases militares estadounidenses en Qatar e Irak en represalia por el ataque de Estados Unidos contra sus instalaciones nucleares este fin de semana.
Las agencias de noticias Reuters informó que se escucharon explosiones en la capital de Qatar, Doja. Por su parte, Axios confirmó que multiples misiles fueron lanzados hacia Qatar y uno más hacia Irak, según un funcionario israelí.
El Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán señaló que el número de misiles disparados fue igual al número de bombas que Estados Unidos utilizó en su ataque el sábado pasado.
Hasta este momento ha trascendido que una de las bases atacadas es Al-Udeid, la base estadounidense más grande en Medio Oriente. Esto fue confirmado por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC), quienes emitieron un comunicado donde informaron que habían lanzado un «devastador y poderoso ataque con misiles» contra dicha base.
Qatar condena el ataque y piden solucionar la escalada del conflicto a través del diálogo
Por su parte, el portavoz oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Qatar condenó el ataque a través de X y aseguró que la fuerza aérea qatarí frustró el atentado interceptando «con éxito los misiles iraníes», sin que se reportaran heridos ni muertes.
Además, anunció que Qatar se «reserva el derecho de responder directamente de manera equivalente a la naturaleza y la escala de esta agresión descarada, de conformidad con el derecho internacional».
«El Estado de Qatar fue uno de los primeros países en advertir sobre los peligros de la escalada israelí en la región.
Hemos pedido sistemáticamente que se dé prioridad a las soluciones diplomáticas y hemos subrayado la importancia de la buena vecindad y de evitar la escalada», Ministro portavoz de Relaciones Exteriores de Qatar.
Cabe destacar que, Al-Udeid fue un importante lugar de concentración para los activos estadounidenses durante las guerras en Irak y Afganistán. En fechas recientes el presidente de Estados Unidos, Donald Trump visitó a las tropas en las instalaciones que alberga a unos 8.000 soldados estadounidenses.