Cuando piensas en repartir tus bienes, ya sea ahora o después de tu muerte, hay dos caminos legales: hacer un testamento o realizar una donación en vida. Ambas opciones son válidas en México, pero tienen diferencias clave que debes conocer.
¿Qué es un testamento?
Es un documento legal donde decides quién heredará tus bienes cuando mueras. Se firma ante notario y puedes cambiarlo cuando quieras.
Ventajas:
- Sigues siendo dueño de tus bienes hasta tu muerte.
- Es económico y fácil de hacer, sobre todo en septiembre (Mes del Testamento).
- Puedes cambiarlo si cambian tus planes.
Desventajas:
- Tus herederos deberán hacer un juicio sucesorio (que puede tardar y costar).
- No evita posibles peleas entre familiares.
¿Qué es una donación en vida?
Es entregar un bien a otra persona mientras estás vivo, sin esperar a tu muerte. Puede incluir propiedades, dinero u otros bienes.
Ventajas:
- El bien pasa de inmediato a la persona que elijas.
- Evitas juicios sucesorios.
- Puedes reservarte el derecho de usar el bien (por ejemplo, seguir viviendo en tu casa).
Desventajas:
- Una vez donado, ya no es tuyo (salvo excepciones).
- Puede haber impuestos, especialmente si no es entre familiares directos.
- No se puede revertir fácilmente.
Diferencias principales
Punto clave | Testamento | Donación en vida |
¿Cuándo surte efecto? | Después de tu muerte | De inmediato |
¿Sigue siendo tuyo el bien? | Sí, hasta que mueres | No, ya pasa al donatario |
¿Se puede cambiar? | Sí, mientras vivas | No fácilmente |
¿Hay juicio después? | Sí, sucesión | No (solo se registra) |
¿Hay impuestos? | No, por herencia directa | Sí, si no es entre parientes cercanos |
Impuestos y costos
- Testamento: Heredar entre padres, hijos o cónyuges está exento de ISR.
- Donación: Está libre de impuestos si es entre padres, hijos, abuelos, nietos o cónyuges. Si no, puede haber ISR.
Ambas opciones requieren escritura pública y registro si hay bienes inmuebles.
¿Cuál te conviene?
Haz un testamento si:
Quieres seguir teniendo control de tus bienes, cambiar de opinión o repartir todo cuando mueras.
Dona en vida si:
Deseas entregar ya tus bienes, evitar juicios y ayudar a tus seres queridos desde ahora.
Ambas opciones tienen ventajas. Si quieres proteger tu patrimonio y evitar problemas legales a tu familia, lo mejor es asesorarte con un notario para decidir cuál opción se adapta a ti.